La primera vez que vi la camiseta de rayas horizontales del Barça pensé «hay que romper contrato con Nike YA». Con rebajas en torno al 80% del precio, los fabricantes chinos han conseguido copias casi indistinguibles del producto auténtico. El equipamiento del árbitro se completa con un silbato para señalar faltas, el inicio y el final del partido, entre otras decisiones, además de un cronómetro para medir el tiempo de juego.