Las infames declaraciones del entrenador Fabio Capello cuando entrenada a la selección rusa en 2015 («el fútbol no es para mariquitas») o el insulto de Koke a Cristiano Ronaldo («maricón») que se hizo famoso por la respuesta del portugués («maricón, sí, pero lleno de pasta, cabrón») son algunos de los ejemplos recientes de una larga lista de descalificaciones. El brasileño mejora cada año, y sigue siendo un dolor de cabeza para las defensas a las que se enfrenta.